Tres menores de edad que acosaron a un escolar en la ciudad de Huesca se libraron hoy de un juicio penal que se iba a celebrar el Juzgado de Menores de la capital altoaragonesa a cambio de un año de libertad vigilada para cada uno y una multa de 4.000 euros en total gracias a un acuerdo tomado por ambas partes esta mañana.
Los tres menores han sido condenados por sendos delitos de coacciones y tienen prohibido acercarse a la víctima, a su domicilio o a su colegio, a menos de
La libertad vigilada significa que se hará un seguimiento de la actividad de estos tres jóvenes y de su asistencia al centro educativo. Esta medida obliga a los jóvenes a seguir las pautas socio-educativas señaladas por el profesional encargado de su seguimiento, de acuerdo con el programa de intervención elaborado y aprobado por el juez de menores.
Tienen, entre otras obligaciones, la de asistir con regularidad al centro docente correspondiente y acreditar ante el juez la asistencia regular o justificar en su caso las ausencias, cuantas veces fuere requerido para ello. También deben someterse a programas de tipo formativo, cultural, educativo, profesional, laboral, de educación sexual, de educación vial u otros similares. No podrán acudir a determinados lugares, establecimientos o espectáculos, según lo decida el profesional que se les asigne. Tampoco podrán ausentarse del lugar de residencia sin autorización judicial previa y, de hecho, tienen la obligación de residir en un lugar determinado.